El Instituto de Historia Regional y Argentina “Héctor Domingo Arias” es creado por resolución 8/81, el día 2 de junio de ese año. En 1982, tras el fallecimiento del profesor Arias, por resolución 175/82, se le impuso al instituto su nombre, en mérito a su destacada labor docente y de investigación.

 

Al crearse, se enunciaron los objetivos que debía perseguir el nuevo instituto:

“Impulsar el conocimiento de la historia local, regional y nacional, contribuyendo a la comprensión y solución de los problemas que afectan a la comunidad local, regional y argentina.”

Fue el primer instituto que a nivel universitario centró su actividad en el objetivo “regional” enunciado, proyectándose en la interrelación académica con Cuyo, Catamarca, Río Cuarto y Bahía Blanca.
En la primera, impulsó desde 1985, siete encuentros de historia regional de Cuyo, cuyos resultados se encuentran publicados.

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El instituto continuó su actividad relacionándose con organismos nacionales como el Conicet y la SUBCYT, que mediante subsidios apoyaron las investigaciones, y con instituciones educativas internacionales como la Facultad de Historia y Geografía de Sevilla, España, con quien se realizó un convenio que permitió el intercambio mutuo de investigadores.

Actualmente, el instituto forma parte del Comité Internacional de las Ciencias Históricas, revalorizando los estudios regionales, pilar fundamental en la interpretación del devenir del siglo XXI.

En lo interno, priorizó la formación de recursos humanos, incorporando a jóvenes egresados y a alumnos, adiestrándolos en investigación y estableciendo el curso de adscripción.

También se destaca el despliegue de la Cátedra Libre de Historia Regional, que desde 1985 viene dictándose con distintas temáticas, destinada especialmente a docentes e interesados en general. En 1988 el instituto mediante dicha cátedra, llevó a todos los departamentos de la provincia equipos de investigadores que dieron a conocer las investigaciones realizadas en torno a la historia de cada comuna.

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Desde hace varios años, el accionar del instituto apunta a:
– Estructurar líneas teóricas y metodológicas sobre historia regional, incluyendo la conceptualización de lo local, provincial, nacional y latinoamericano.
– Analizar problemas que inciden en la realidad de la provincia (problemas de la zona de frontera; historia de la minería; lugares y monumentos históricos: aportes a la inmigración; historia de la educación).
– Contribuir a perfeccionar la consulta de los aportes heurísticos de nuestros archivos locales.
– Formar recursos humanos que aseguren el futuro de nuestros estudios regionales.
– Buscar relaciones con otras unidades similares de orden local, regional, latinoamericano y europeo.

Hoy continúa reivindicando la historiografía regional, la legitimidad de los procesos de integración que hacen posible el futuro latinoamericano; razón por la cual ha sabido ganarse un merecido reconocimiento a la labor realizada en favor del conocimiento y estudio de la historia.

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